Efectivamente parecía que confrontar de manera directa y
contra atacando al crimen organizado seria la
solución, parecía que no serian tantos los criminales y podrían acabar con ellos mediante la
fuerza, parecía que el costo serian bajas solo en pueblos
tomados por el crimen organizado, parecía una solución.
La verdad es que el costo de esta
"solución" ha sido el inicio de una guerra sin cuartel, que de hecho estaba incluido en el plan original, pero esta guerra se llevo no solo a terrenos despoblados, pasos fronterizos o localidades ocupadas por criminales, sino que llevo y se esta llevando en un
campo de batalla que se mueve y se extiende y que esta repleto de
gente inocente y trabajadora que ha sido afectada.
Se han atrapado a muchos delincuentes es cierto, se han incautado muchas armas es cierto, se ha destruido mucha droga y quemado mucha mariguana (con el objetivo de destruirla no como en los conciertos de caifanes) pero este aparente avance nos ha dejado con una muy
mala experiencia.
Se
suponía que pronto veríamos
debilitadas las fuerzas de los carteles al generar bajas mediante un ataque
frontal, donde se
suponía que emprenderían un tipo de retirada y trabajo cauteloso, fuera de la ciudad o se pondrían a trabajar su mercado de la droga a escondidas, sin hacerse notar, creando así un ambiente relajado para quienes no estén en el negocio, logrando una funcional
tranquilidad disminución de la
violencia y no ha sido asi, se volvió un espectáculo de sangre y fuego con duros enfrentamientos cada vez mas
retadores y con armas de igual calibre que las fuerzas militares, para colmo cada vez se encuentran mas lugares que resguardan grandes cantidades de armas, vehículos y equipo, teniendo aun estabilidad y una merma poco significativa.
Se
suponía que al causar bajas en los carteles iba a quitarle lo
"atractivo" a los criminales ante los jóvenes inadaptados que buscaban una manera
fácil y segura de obtener dinero,
sexo, drogas, sexo, automóviles, sexo, bebida, sexo y otras cosas que antes eran una garantía para estos grupos del crimen organizado que tenia toda frontera y punto de venta asegurado y arreglado gracias a funcionarios
corruptos. Y cuando parecía que estaba funcionando y que el crimen tenia que recurrir a
secuestrar migrantes centroamericanos y autobuses para llenar sus filas de personal...
Nada! nos encontramos con que hay menores de edad dentro de los grupos del crimen que no fueron integrados por la fuerza y que se sienten orgullosos de pertenecer a grupos criminales y hacer realidad sus fantasías del GTA, Call of Duty(pero al revez) y otros
videojuegos, al fin niños! En lugar de que se llevaran a la realidad el Guitar Hero y se pusieran a
rockear.

Entonces estamos todos en contra y me refiero a en contra unos con otros y hasta con
nosotros mismos, por un lado no queremos que los criminales tomen el
control, pero por otro no es buena idea vivir entre el conflicto armado generado de esta lucha contra el crimen.
No queremos esta
guerra pero no queremos criminales por todos lados, no queremos
militares en la esquina ni tampoco vendedores o queremos vigilancia militar pero no queremos oír
balazos, no queremos estrategias militares pero no queremos desatención, al final de cuentas
no sabemos que hacer, que decir, por la simple razón de que no estamos acostumbrados a este tipo de situaciones, no habíamos vivido un ambiente
hostil como este.
Pero para todo hay muchas soluciones, habrá que encontrar una solución que cumpla con los requerimientos. Es cosa de buscar, no de pedirle a los demás la respuesta, la respuesta esta...
flotando en el viento!